El léxico neológico procedente de las nuevas tecnologías e internet es de los más productivos en la actualidad. Este hecho se une a la realidad presente en la que, debido a la pandemia por COVID-19, nos hemos visto envueltos en la necesidad de «virtualizar» la inmensa mayoría de los procesos comunicativos. En este sentido, la pieza léxica que nos ocupa, en sus dos versiones, ha visto aumentado de una manera considerable su uso para referirnos a encuentros síncronos, formativos y científicos en línea. Estamos, pues, ante un anglicismo para aludir a un ‘seminario virtual’, cuyo origen es una acronimia de dos elementos (web + seminar) cuya fusión ya tiene lugar en la lengua inglesa.

[Dibujo] dos pupitres vacíos frente a un teléfono móvil gigante con una vídeollamada en la pantalla

Alexandra_Koch (Pixabay)

Dos posibles formas son las resultantes: la una, más frecuente, que calca la unidad en inglés (webinar); la otra, que adapta al español la segunda parte del acrónimo, optando por seminario en lugar de seminar (webinario). Del mismo modo, en el primer caso, observamos la presencia de dos posibles plurales: webinars (con apego absoluto al inglés) o webinares (con adaptación morfológica al plural español).

El primer uso de webinar atestiguado data de 2014, fecha posterior a la publicación de los diferentes diccionarios de referencia, y en el ámbito hispanoamericano, por influencia más directa del inglés, y su uso se multiplica exponencialmente durante 2020.

  • Así, el público tiene la oportunidad de conectarse a estos seminarios virtuales o webinars desde sus computadoras, e interactuar con los expositores. [La República (Perú), 8/04/2014]
  • Algunos de los contenidos pueden ser eBooks, webinars (un seminario impartido en línea), white papers (un papel de investigación sobre cierto tema), casos de estudio y videos explicativos. [El Universal (México), 17/05/2017]

En este ejemplo de México podemos observar incluso que el hablante aún cree necesaria la aclaración de su significado entre paréntesis tras el uso del vocablo, lo cual denota la inestabilidad y/o poco uso del elemento.

Así, en la web de la Fundéu, en su buscador urgente de dudas, se recomienda el uso de seminario web o webinario mejor que el anglicismo webinar. Se indica que webinario «goza ya de abundante uso», hecho que en nuestras indagaciones no hemos constatado. Menos usado es webminario y se desaconseja webminar, vocablos que, por otro lado, no hemos localizado en las bases de datos consultadas. Se utilizan también y son válidas, según el artículo mencionado, seminario en línea y ciberseminario (que incluye el elemento compositivo ciber– que alude a la relación con las redes).

El Oxford English Dictionary, que define el término como ‘a seminar conducted online, in which participants interact with one another in real time’, indica que la entrada data de 1997, por lo que, incluso en la lengua de origen, el término es relativamente joven. La novedad del término se constata por su ausencia en la mayoría de las obras lexicográficas de referencia; no lo encontramos consignado en ninguna de las dos formas ni en el diccionario normativo ni en los diferentes diccionarios de uso como Alvar2, NEOMM, VOXUSO, Clave, o DEA, en los que generalmente aparece la primera parte del compuesto: web ‘conjunto de información que se encuentra en una dirección determinada de internet’ (VOXUSO), de pronta implantación y mayor frecuencia de uso. De hecho, tal elemento aparece como constituyente de otros compuestos que sí están recogidos en las diversas fuentes, como webmaster, weblog o webcam. Lo mismo ocurre en otras lenguas románicas, como el italiano (l’Istituto Treccani solo consigna un caso en su apartado sobre neologismi de su web), el francés (webinaire) o el portugués (webinário). No aparece en los diccionarios de referencia de estas lenguas y solo se registra algún testimonio en diccionarios online, generalmente asociado a la virtualización de los encuentros propiciada por la crisis derivada de la pandemia.

Constatamos, no obstante, su amplia presencia en ámbitos académicos y científicos, como páginas web de universidades e instituciones científicas de diversa índole, así como en contextos formativos de empresas. Tal es el caso del siguiente ejemplo:

  • Cerca de 450 empresarios participan en el ciclo de webinars de la FES en el último mes para abordar distintos aspectos relacionados con la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de Covid-19. [El Adelantado (España), 6/06/2020]

Tampoco aparecen consignadas en corpus de referencia como el CREA o el CORDE, si bien, encontramos dos apariciones de webinar (webinario no aparece) en el CORPES XXI, concretamente en la zona Andina (Bolivia) en 2015 y 2020:

  • Como parte del trabajo de investigación, el viernes 17 de abril a las 15:00, se llevó a cabo el Webinar “El impacto del Covid-19 en el turismo boliviano y estrategias para salir de la crisis”. [Ríos Aranda, Vanessa, “Turismo propone alianzas empresariales para superar esta coyuntura adversa”. Jornada (Bolivia), 2020]

Todo parece indicar que estamos ante términos de reciente aparición. Según registros del Observatori de Neologia solo aparece webinario una vez:

  • Es el número de ponentes nacionales e internacionales que han participado en los 43 webinarios celebrados en sesiones de mañana y tarde. [Diario Vasco (España), 1/06/2020]

Curioso nos resulta el empleo de la versión femenina del anglicismo, bastante menos frecuente. Se reinterpreta que el género predominante en el acrónimo es el del primer elemento, web, y no el del segundo, que le otorgaría al conjunto el mayoritariamente empleado género masculino. Veamos dicho uso en el siguiente ejemplo que, además, se sitúa en la zona diatópica andaluza:

  • Juan Bravo, consejero de Hacienda y Javier González de Lara, presidente de la CEA, participaron en una webinar organizada por La Opinión de Málaga con el patrocinio de Cajasur y la colaboracion de Sando, Construcciones Fearral, Reciclados Roster y Automoviles Nieto. [La Opinión de Málaga (España), 1/06/2020]

El uso de este vocablo implica que la formación a distancia ofrecida se caracteriza por su innovación, dinamismo, presencia de retroalimentación por parte de los participantes, así como la aportación de un importante componente visual. Dado el contexto que se ha producido por la COVID, los webinarios se han convertido en una herramienta eficaz en el ámbito académico que aporta dinamismo y frescura a la educación virtual. Al ser un medio de comunicación interactivo, su eficacia aumenta. Tales aspectos se incluyen en usos como los siguientes:

  • La escuela de formación de Cofares, eDUCO+ Health Academy, imparte un webinar que facilitará a los estudiantes de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo poder titularse en plena crisis por el Covid-19. [La Razón (España), 15/04/2020]
  • El SNE ofrece, en colaboración con agentes del sector, una docena de webinares a través de su canal de Youtube. [Diario de Navarra (España), 21/05/2020]

Pese a que su origen sea seminar, en español su alcance semántico ha aumentado, y podemos referirnos con webinario a todo aquel discurso de carácter científico, académico o divulgativo que se transmita mediante la web, sea este un taller, un seminario o un conjunto de conferencias.

Dadas las circunstancias sociales y pragmáticas en las que vivimos, auguramos larga vida a ambos vocablos, si bien la incipiente mayor frecuencia y generalidad de uso de webinar vaticina su triunfo frente a la más promocionada por la norma, por su adaptación a la morfología del español, webinario.

M. Carmen García Manga
Universidad de Córdoba (España)

webinar o webinario m.

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