El género cinematográfico, especialmente los subgéneros de ciencia ficción y de fantasía, ha sido y es una fuente de renovación léxica. ¿Quién, antes de ver la película, tenía la menor idea de qué era un gremlin? ¿O quién había oído hablar de cubos tetradimensionales antes de ver Interstellar? Solo los especialistas en la materia pueden conocer el significado de este tipo de palabras y, a veces, los directores de cine consultan a estos especialistas para dotar de credibilidad sus producciones. Con las últimas películas de ciencia ficción y superhéroes, una de las palabras más extendidas en el vocabulario cotidiano es multiverso.
El universo se entiende como el «conjunto de individuos o elementos cualesquiera en los cuales se consideran una o más características que se someten a estudio estadístico» (DLE, s. v. universo, sa). Sin embargo, esa no es la única definición de universo que conocemos, ni mucho menos la primera. Para muchos de nosotros, y de acuerdo con las leyes físicas establecidas por Platón (s. V a. C.), Isaac Newton (1642-1727), Richard Feynman (1918-1988) o Paul Davies (1946-), el universo es ese conjunto de todas las entidades físicamente observables que se encuentran en el mismo espacio-tiempo. Es un término que también admite otros sentidos como ‘cosmos’, ‘mundo’, ‘naturaleza’ o ‘realidad’, y es este significado cosmológico, original y genuino, el que debemos tomar para analizar el neologismo que nos atañe.
El multiverso, en primer lugar, es esa hipótesis que estima la presencia del conjunto de universos distintos que existen al mismo tiempo. Es decir, a pesar de no estar probado aún, según los cosmólogos teóricos, los multiversos son modelos del conjunto espacio-tiempo interconectados, el conjunto de universos. La existencia de los multiversos nos remite a la idea de que no existe un solo universo, pero no solo eso, sino que existen simultáneamente.
El vocablo español se ha tomado siguiendo el patrón del inglés multiverse, y constituye, al fin y al cabo, un acrónimo de multi- y universo: al sostener que hay más de un mundo posible, se cambia el prefijo uni- ‘uno’ por multi- ‘muchos’. La primera vez que se documenta este término en inglés es en el ensayo Is life worth a living? (1895) del filósofo William James, según afirma el Online Etymology Dictionary. En este trabajo comentaba lo siguiente:
[…] Nosotros, en el siglo diecinueve, con nuestras teorías revolucionarias y nuestras filosofías mecanicistas, ya conocemos demasiado imparcialmente la naturaleza y ya alabamos demasiado abiertamente cualquier dios de quien puede ser una expresión adecuada de su carácter. Realmente, todo lo que conocemos de lo bueno y de la belleza viene de la naturaleza, pero, a pesar de ello, conocemos la maldad. La naturaleza visible es toda plasticidad e indiferencia, un multiverso moral, como uno podría llamarlo, y no un universo moral.
Observamos, pues, que para William James el multiverso era un opuesto al universo y significaba el «universo imaginado como la ausencia de orden, unidad, o un poder único de régimen y guía». La idea que tenemos hoy de multiverso la acuñó en 1952 el físico austríaco Erwin Schrödinger, cuando lo definió como «un conjunto hipotético de universos diferentes o idénticos, el nuestro incluido», con lo que ofreció la primera teoría del multiverso. Otros cosmólogos como Stephen Hawking (1942-2018) y, más recientemente, Thomas Hertog (1975-) han trabajado también sobre este tema, tratándolo de descifrar.
En BOBNEO se recoge por primera vez el término en el español peninsular en 2003 y se registra enseguida también en el español de América:
- Por lo tanto, no existe un solo universo sino múltiples; existe lo que los defensores de esta hipótesis llaman un multiverso. [La Vanguardia (España), 14/7/2003]
- El astrónomo inglés Martin Rees cree que hay muchos universos tal vez infinitos que conformarían un multiverso. [Página/12 (Argentina), 22/5/2005]
- El último trabajo de Stephen Hawking pone en duda la teoría actual de los multiversos. [El Mercurio (Chile), 3/5/2018]
A partir de la extensión del término a otros ámbitos, aparece con frecuencia aplicado al mundo de los superhéroes, pero también de un modo irónico a situaciones políticas y sociales complejas, como se ve en el tercer ejemplo:
- Si se confirmase la presencia del Quicksilver del universo de X-Men dentro de WandaVision esto supondría el salto al multiverso en el Universo Cinematográfico Marvel y se abriría la puerta al posible regreso de otros actores de los mutantes de Fox. [Excélsior (México), 4/2/2021]
- Evelyn Wang no deja de ser como el Eliot (Brendan Fraser) de Al diablo con el diablo (Harold Ramis 2000) alguien que busca su mejor versión para chocar con el desastre y acabar descubriendo que salvar tu día a día es incluso más heroico que salvar al universo o al multiverso. [Fotogramas (España), 27/5/2022]
- La historia de tres hombres-araña en este multiverso llamado Perú. [El Comercio (Perú), 7/6/2022]
Aunque todavía no aparece en repertorios del francés, el italiano o el catalán, lenguas como el portugués o el inglés ya incorporan la palabra en sus diccionarios. Así, en portugués se define en Infopéida Dicionários Porto Editora como «realidad hipotética que presupone la existencia de una pluralidad de universos (entre los cuales se cuenta aquel que conocemos) que existen de forma paralela». Para el inglés, el Cambridge Dictionary lo define como «colección de distintos universos que se cree que existen al mismo tiempo».
Si bien la existencia de multiversos todavía es solo una hipótesis científica, quizás los físicos puedan demostrarlo pronto. En cualquier caso, el diccionario ya contiene palabras que aluden a seres imaginarios, como los ángeles, los gnomos o los centauros, o a entidades invisibles al ojo humano, como los átomos. Como acto de fe en la ciencia, el diccionario debiera incorporar ya esta voz. Quizás en un universo paralelo el diccionario ya la incluye.
Marina Morales i Rubió
Universitat Pompeu Fabra (España)
¡Qué interesante entrada! Gracias.
Articulo muy interesante. Fomenta la reflexión además de conseguir una reubicación inmediata, del lector, en nuestro espacio-tiempo.
Muy interesante! Gracias! Perdon, pero creo que el ensayo de William James se titula, “Is life worth living?”