Blanco o negro, bueno o malo, todo o nada. A veces vemos el mundo en pares, mitades complementarias, segmentos binarios. Con las categorías de género nos pasa lo mismo, «hombre o mujer» es el modelo establecido. Aun así, las personas que no se perciben ni quieren ser percibidas exclusivamente dentro de una de estas dos categorías han existido a lo largo de la historia con diferentes nombres. Y las palabras que estas personas han utilizado para definirse también han variado en forma.