Si alguna vez has visto a un grupo de personas corriendo por la calle perseguidas por un camarero, probablemente habrás sido testigo de un simpa. Esta palabra es neológica desde una perspectiva lexicográfica, ya que no tiene presencia en el diccionario normativo del español, pero no es una unidad reciente, pues el arte (ilegal) de no pagar la cuenta es una práctica recurrente y antigua. De hecho, el Observatori de Neologia recoge esta denominación desde el año 2008 y sigue viva en el uso de los hablantes, sobre todo en registros coloquiales, pues se sigue detectando a día de hoy en el vaciado de prensa y revistas.
simpa m.
