El ser humano ha ido inventando a lo largo de su historia distintas formas de comunicarse: desde las más primitivas, como las pinturas rupestres, hasta las más modernas, como las audiovisuales (propiciadas en su momento por el descubrimiento de la electricidad), pasando, obviamente, por las vinculadas a la escritura en sus distintas formas (manuscritas, mecanizadas a través de la imprenta y los ordenadores). El uso fue propiciando a su vez la conformación de distintos géneros (la novela, el cuento, el artículo, la columna, la crónica, la serie, el largometraje, etc.) y, ya en la etapa contemporánea, la llegada de Internet revolucionó esta configuración genérica y provocó el nacimiento de formas de expresión tecnificadas, innovadoras y más complejas, que no encajaban del todo en los patrones configurados históricamente.
En este contexto, el neologismo transmedia, adoptado en general en el amplio dominio geolectal hispánico según los datos manejados, constituye un préstamo bastante reciente, pues no se encuentra documentado en ninguna de las fuentes lexicográficas de referencia del español actual (Alvar2, Clave, DEA, DRAE23, NEOMM, VOXUSO) ni de otras lenguas románicas. Ni siquiera se halla en los repertorios del inglés, a excepción de la segunda edición de un diccionario de especialidad como A Dictionary of Media and Communication de Daniel Chandler y Rod Munday (Oxford University Press, 2016), que incorpora las entradas transmedia storytelling y transmedia forms. Está formado por dos elementos claramente identificables (gracias en parte a la necesaria división silábica de las tres consonantes juntas de su interior): trans- y media.
La base media es, en principio, el plural del sustantivo neutro latino medium (‘medio, centro’), voz a su vez patrimonial que posee el significado de ‘vía’, ‘manera’ o ‘cosa que puede servir para un determinado fin’ (DRAE23). Sin embargo, media nos ha llegado por vía indirecta, remozada a través del inglés, para identificar genéricamente al conjunto de los ‘medios de comunicación’.
Internet permite conectar con gran cantidad de destinatarios a un mismo tiempo, razón por la que potenció los llamados mass media (originalmente, prensa, radio y televisión) o medios de comunicación de masas. Ofrece asimismo la posibilidad de transmitir los mismos contenidos por distintos canales, y combinar de forma integrada texto, fotografías, vídeos o sonido, por lo que se suele afirmar que es multimedia o cross-media. Por último, los usuarios pueden interactuar entre sí a través de plataformas muy versátiles, que han pasado a considerarse social media o medios sociales.
La incesante evolución de los medios de comunicación ha provocado el nacimiento de nuevas formas de expresión y a la base media se le ha unido en fechas recientes el prefijo trans-, el otro componente de este neologismo. Este significa originalmente ‘al otro lado’ o ‘a través de’, por lo que uno puede fácilmente hacerse una idea inicial, siquiera aproximada, del significado de la palabra resultante: se aplicaría a la comunicación que se realiza a través de varios o distintos medios. ¿En qué se diferencia, pues, de los mencionados mass media, multimedia o social media?
Comencemos por sus semejanzas. El primer testimonio de esta palabra en la base de datos del OBNEO atestigua la incipiente transformación de un género tradicional, como es la ópera, para llegar a una audiencia más amplia, merced a las posibilidades que ofrece el ciberespacio:
- La ciberópera seria es Uluru, una obra interactiva, multicultural y transmedia de Marc Liyanece, que toma su título del nombre con que los aborígenes australianos denominan al gigante monolito Ayers Rock, situado en el centro de Australia. [El País (España), 3/05/1997]
Transmedia representa asimismo la posibilidad de combinar distintas plataformas y fuentes informativas para la consecución de un fin, ya sea comunicar o informarse:
- Estamos en una situación de transmedia. La noticia, o la información política, o económica, la vivimos a lo largo del día en diferentes plataformas. En televisión en un momento, y después en la lucha de la segunda pantalla que es twitter. [La Vanguardia (España), 19/03/2012]
- El proyecto ahora es transmedia y además de la serie, los niños tendrán contenidos para Internet y dispositivos móviles. [El Tiempo (Colombia), 15/09/2013]
Conviene, no obstante, echar un vistazo a su combinatoria para percibir su singularidad. Aunque pueda aparecer en contextos propios de un sustantivo (situación de transmedia), lo más frecuente es encontrarlo como adjetivo invariable —hasta que se proponga, si ocurre, una eventual adaptación a la morfología del español (¿*transmedial?)— pospuesto al sustantivo al que acompaña. Como confirman los datos del Corpus del Español de Mark Davies (última consulta: 26/04/2017), aparece combinada preferentemente: a) con el sustantivo «extenso» proyecto; y b) con la voz, más «intensa», narrativa (y sus variantes narración, historia, relato, etc.), acomodos hispánicos varios del inglés transmedia storytelling/narrative. En definitiva, estamos ante la última novedad en el viejo arte de contar historias:
- La comunidad global, que tiene capítulos en todo el mundo posicionadas en ciudades como Nueva York, París y Barcelona, busca desarrollar talleres y seminarios enfocados en cómo las narrativas transmedia han cambiado las formas de contar una historia en distintas plataformas. [La República (Perú), 16/11/2015]
- Repasa la narrativa transmedia que hemos creado con los tuits sobre la Semana de la Moda 2. [La Opinión de Málaga (España), 11/10/2013]
- En la era multipantalla las series, películas o videojuegos actúan en un mundo transmedia. Es decir que puede pasar de un medio a otro para enriquecer las historias que cuentan. Héroes, por ejemplo, presentaba nuevos personajes a través de webisodies. [El País (España), 31/08/2010]
En esta nueva dimensión narrativa ya no asistimos a la mera yuxtaposición de medios o géneros, sino que sus límites parecen desdibujarse para configurar un espacio único, donde incluso se diluye la autoría:
- Si al escuchar una canción en mitad de un texto se le llamaba multimedia, el proyecto Año Cero es un ejemplo sobredimensionado de narrativa transmedia, que implica a músicos, actores, gestores de foros, escritores, y construye una novela de ciencia ficción modulada como un videojuego en el mundo real. [La Vanguardia (España), 15/07/2007]
En efecto, cada espacio, recurso o medio implicado en la trama del relato constituye una ventana por la que el usuario no solo se asoma a él sino que también lo construye, de forma parecida a como se hace en las páginas electrónicas denominadas wikis.
La aparición del vocablo transmedia es, pues, una manifestación más de los tiempos en los que vivimos, marcados por las redes sociales y los proyectos colectivos, así como por el deseo de romper con los esquemas tradicionales.
Esteban T. Montoro del Arco
Departamento de Lengua Española
Universidad de Granada (España)