El beneficio de los recursos que atesora la Tierra constituye una de las actividades más antiguas del ser humano. De hecho, el dominio sobre determinados minerales o metales fue utilizado para designar algunas etapas de la historia del ser humano (Edad de Piedra, Edad de Bronce o Edad de Hierro, por ejemplo). La evolución de las técnicas de extracción y beneficio de estos elementos permitió ampliar la explotación de aquellos recursos para conseguirlos no solo desde la superficie sino también desde el subsuelo. Este trabajo, así como el conjunto de yacimientos y personas dedicadas a ella, recibió con posterioridad el nombre de minería, como recoge DLE. Sin embargo, desde tiempos recientes, la intención de querer conseguir mayor rendimiento del subsuelo ha ocasionado el nacimiento de una nueva palabra, megaminería, para un modelo de explotación de minerales y metales que ha despertado una fuerte oposición social, de la que se han hecho eco tanto la prensa como otras publicaciones especializadas.