En el ámbito hispánico, las suricatas fueron durante siglos poco conocidas fuera del campo de la zoología, lo que explica que ninguno de los principales diccionarios generalistas recogiera la palabra hasta 1996, cuando lo hizo la primera edición de Clave. No ha sido hasta las últimas décadas cuando han empezado a ser más conocidas por los hablantes no especialistas, sobre todo a raíz del estreno cinematográfico de El rey león en 1994. Desde entonces, la suricata Timón, uno de los personajes de la película, que ha vuelto a aparecer en sucesivas secuelas, se ha convertido en una figura célebre de la cultura popular. Más recientemente, también ha crecido el interés científico general por estos pequeños mamíferos emparentados con las mangostas; así lo atestiguan sus apariciones recurrentes en diversos documentales, como los del naturalista y divulgador David Attenborough.